Nubia Osorio

Nuestra amada madre y abuela, Nubia Osorio Olaya, nació en un hermoso domingo, 16 de abril de 1933, en Sevilla, Valle, Colombia. Sus padres fueron Tulio Osorio Hernández y Sofía Olaya Hernández. Nuestra madre y abuela fue la segunda de 10 hijos, de los cuales sobrevive el menor de la familia. Ella se unió en matrimonio con Montgomery De Jesús Escobar Moreno. Fruto de esta unión nacieron sus hijos Martha Patricia, María Victoria, Juan Carlos y Wilson Montgomery. Su primera nieta, Carolina, fue criada como su hija menor. Todos sus hijos y nietos, Daniel, Elizabeth Michelle, Sofia Stephanie, Ana Sofía, Juan Andrés, Lucas y María Paz, la recordaremos como la mejor madre y abuela, una mujer que siempre tuvo sus brazos abiertos para todos nosotros. Fue una mujer de luz que siempre brindó paz a todos los que estuviéramos a su alrededor. A través de su vida descubrió muchos talentos, el que más compartió con nosotros fue el de la pintura. En sus obras, demostró la paz y la armonía de su alma. Nuestra madre y abuela disfrutaba de largas conversaciones contando historias de su vida, salir a tomar café, ver telenovelas, hablar por teléfono, salir de compras, viajar, ir a los parques, observar la naturaleza, cuidar de las plantas y las flores. Sus comidas favoritas fueron la arepa, los frijoles, el sancocho y el salmón. Disfrutaba de la lectura y de llenar sopas de letras. Le gustaba jugar al parqués y al dominó. Sus colores favoritos fueron los tonos pasteles. Como la mujer vanidosa y femenina que siempre fue, siempre lucía elegante y preciosa. Nunca alcanzarán las palabras para describir lo que sentimos por nuestra hermosa madre y abuela, quien fue nuestro gran tesoro. A continuación, cada uno de nosotros le brindamos nuestro homenaje:


Querida Mamá, gracias por ser mi mamá. Gracias por tus enseñanzas. Gracias por tu agradable compañía. Gracias por cuidarme y protegerme siempre. Gracias por tu amor incondicional. Gracias mamá por regalarme todos los lindos momentos que hemos vivido. Mamá estarás presente en toda mi vida. Te llevo en mi corazón. Seguiré tus recomendaciones y enseñanzas. Te prometo cuidarme y seguir adelante. Gracias mamá linda. La bendición. Martha Patricia.

Quiero hacer honor siempre de la mamá más linda del mundo. La mamá abnegada que siempre estuvo presente en nuestras vidas. La mujer más hermosa del mundo que siempre tuvo una sonrisa para todos los seres humanos. ¡Gracias por ti mamita! Gracias por acompañarme en todos los momentos de mi vida sin importar la hora. Gracias por abrirme tus brazos siempre, por escucharme, por darme tu amor. Te amo mami linda. I love you! María Victoria.

Mi adorada mamita, gracias por haberme dado la vida, me siento muy orgulloso de ser tu hijo y tu legado siempre estará con nosotros, tu fuerza, tu amor, tu alegría, tu apoyo en los momentos más difíciles, gracias mami. Nuestra familia va a estar unida por siempre y en nuestros corazones tú estarás para siempre.... Mami te amo, te voy a extrañar muchísimo, pero sé que nos volveremos a ver. Tu hijo con amor, Juan Carlos.

Madre amada. Gracias por tu amor y apoyo incondicional. Soy muy afortunado de haberte tenido como madre. Gracias por tu compañía y por tus consejos. No seré inferior a tus enseñanzas. Lucas y María Paz son tu legado, gracias por todo el amor que les brindaste. Descansa y en un futuro nos encontraremos. Mientras tanto Ana Milena, Lucas, María Paz y yo nunca te olvidaremos. Wilson.

Abuelita, mamita, mi reina, te amo. Me dijiste que nada nos separaría y ese será mi consuelo para seguir viviendo. He estado contigo toda mi vida y nos acompañamos siempre, y así seguirá siendo hasta el final de mis días. Hicimos tantas cosas juntas, me contaste tantas historias, fuimos tan inmensamente felices. En mis días tristes me mostrabas las flores, los atardeceres, los animales y poco a poco me hacías volver a apreciar lo verdaderamente importante. Acompañarte y cuidar de ti, hasta tu último segundo en tu hermoso paso por este mundo, fue mi bendición y un gran honor. Que afortunados fuimos todos los que nos cruzamos en tu camino. Tú iluminabas todo. Gracias por ser mi ángel en tierra y ahora en el cielo. Salvaste mi vida con tu amor. Te cumpliré mi promesa. Hasta que nos volvamos a encontrar, tu nieta hija Carolina.

Abuela, gracias por ser un ejemplo de ser humano, madre y abuela. Fuiste una persona maravillosa llena de amor y que no dudaba en ofrecérselo a los demás. Toda la familia te adoraba a pesar de la distancia que nos separaba...me alegra poder haberte visto una última vez después de tantos años sin hacerlo y haber disfrutado de tu amor, aunque fuera poquito tiempo. Descansa en paz huesos frágiles... Daniel.

Querida Abuelita, tú siempre has sido una de mis personas favoritas. Siempre extrañaré tu forma de ser, tu voz, y tu risa. Muchas de mis memorias de cuando era niña son de cuando veía puras novelas dramáticas contigo. También me acuerdo de las historias fascinantes que me contabas de tu vida. Te recordaré pintando paisajes bellos, y espero que estés en un lugar así de lindo.️ Elizabeth Michelle.

Abuelita, te extrañaré por siempre. Eras mi mejor amiga desde que era pequeña, jugábamos a los coches juntas y cuando crecí siempre estuviste ahí para mí. Siempre recordaré ver novelas contigo o tomar café juntas. Siempre sentí tu amor incluso cuando estabas lejos, y todavía te siento cuidándome. Siempre estarás conmigo y estoy muy agradecida de haber tenido una abuelita tan hermosa y fuerte para admirar. Sofia Stephanie.

Adiós abuelita Nubia, espero que donde sea que estés, estés en paz y goces de tranquilidad. Fuiste una de las personas más puras, nobles y cariñosas que he conocido. Siempre te voy a llevar en mi corazón, y pensaré en ti cada vez que vea una rosa, ya que al igual que esta, tú eras tan bella y delicada tanto dentro como por fuera. Descansa en paz abuelita lluvia. Con amor, Ana Sofía.

Muchas gracias abuelita por ser la mejor. Recuerdo con mucho cariño muchas cosas, pero sobre todo las visitas a la 29 cuando jugaba por esos pasillos. Gracias por estar ahí abuelita lluvia ojalá hubiéramos podido verte una vez más, aun así, te guardaré en mi corazón por siempre. Juan Andrés.
Adiós abuelita Nubia, fuiste un regalo de amor en nuestra niñez, los momentos que compartimos junto a ti nunca los olvidaremos, siempre vivirás en nuestros corazones. Lucas y María Paz.

Te amaremos por siempre,
Tus hijos y nietos.